domingo, 22 de agosto de 2021

H

HAIKU

Cuentas de un collar

engullidas 

                por 

                        el

                              agua.


Las piedras del mar. 



HIPOCAMPOS

Lánguido espíritu marino abraza

el trotar de dos finos 

cuerpos que 

se retuercen y se enlazan

al son del xilófono 

de sus espaldas.


¿Podría ser ese

                       su campo de batalla?



martes, 23 de marzo de 2021

Enferma

 Siempre sobre lo mismo,

flor desnuda de pétalos,

ojos vacíos de lágrimas,

candela descalza de aromas. 


Angustiante espacio interior,

holgura huérfana de la pluma. 

Y es que sufro pérdida aguda

del mal de cursiva encarnada.


domingo, 13 de diciembre de 2020

A través del espejo

En su tierno corazón de medianoche
se derriten las flores en el cuaderno,
empapando todo lo humano.

.(ǝʇɹǝnɯ ǝp ʎ ɹoɯɐ ǝp 
 sopɐuǝuǝʌuǝ soʇuǝᴉɯɐsuǝd
 ;pɐpᴉɹnɔso ɐʅ uǝ ɐʅnƃɐoɔ 
 ɐpᴉɔǝɹƃǝuuǝ ɐɹpǝᴉɥ ɐ⅂)

martes, 4 de agosto de 2020

Mermelada de limón

Relato final del curso de prosa poética de Junio-Julio 2020.

Inspirado en Alismas de Esmeralda Berbel.

Gracias a Esmeralda, a Joana, a Joaquín, a Carolina, a Josep, a Julia, a Mar, a Rosa, a Salvador, a Sara, a Valentín y a Verónica por este aprendizaje.
 Sois increíbles, ¡Qué os acompañen las letras siempre!


....

Lo único que se mantenía en pie era el limonero. Los arbustos de frambuesa, los arándanos... todos los frutos silvestres parecían querer alejarse de nuestra casa. Cuando era pequeñita la observaba sujetarse al marco de la ventana, en esas eternas noches de primavera. Vigilaba los arbustos para que no escaparan. Luego la llevaba en brazos, rendida por el sueño. Cuando el amanecer empezaba a inundar de rojo la pradera, se me anudaba la garganta despierta; Los arbustos habían vuelto a moverse, y el limonero estaba aún más frondoso.

La intenté acostumbrar de niña al sabor ácido del cítrico para que no sufriera igual. Y me pasaba tardes tristes llenando potes y potes de mermelada amarilla como la ausencia.

- Estos potes están vacíos, mamá. Déjame ir hasta el bosque a buscar sus verdaderos frutos-.

¿Y yo cómo se lo podía negar? Si al final me encantaba verla llegar con la cesta llena de vida. Y nos pasábamos tardes enteras preparando juntas cremas rojas, moradas y azules que endulzaban nuestros sentidos. Me embriagaba del rosado olor a fruta. Me hacía olvidar el veneno del limón.

En la decimosexta primavera trajo un chico de rostro limpio. En sus ojos bailaba la juventud al ritmo de la esperanza. Se querían tanto, que no temían alejarse hasta los confines del bosque. Siempre los veía regresar suspirando aliviada. Y sabía que se intercambiaban las moras con los labios y los arándanos entrelazando sus dedos. Hacia el anochecer volvía y me enseñaba su lengua multicolor. La abrazaba aún más fuerte. 
Un día que los últimos rayos de sol se agrsiaban engullidos por las nubes, llegó ella sola. Con una mano en el pecho casi se tambaleó hacia la puerta.

- Mamá, me sangra aquí. Sangre de limón-.

Ácido cayendo por su cuerpo. Y nunca antes la vi tan apegada al limonero, mordiendo limones y perdiendo los dientes. Dejando en su tronco la seña de un nuevo nombre.
No volvimos a ver frutas silvestres durante un largo tiempo. Y juntas pasamos tardes tristes llenando potes y potes de mermelada amarilla como la ausencia.

viernes, 10 de abril de 2020

Cuando lloro mis ojos son más verdes

La sentencia del Hades
me arrincona y sube hasta mi gaganta.
Noto cada pétalo ennegrecerse
muriendo sus llantos sin rastro.
La aurora difunta
quiere controlar el trazo.

Soy marioneta en mano,
y yo me desdibujo,
dejándome erosionar,
por las olas acorazonadas. 

sábado, 22 de febrero de 2020

En defensa del amor, MANIFIESTO

Guardianes del parnaso;

Despertad de los dulces versos que veláis,
lustrad la armadura de plata de luna
que refleja las flores de invierno.
Están desvistiendo
la acuarela de vuestro anhelo,
están sacudiendo
el sagrado firmamento.

Ignorantes,
devastando mil y un cuerpos,
desenterrando la semilla de cada espectro,
visionarios de dioses
desprovistos de alimento,
el epitafio de las nueve musas
va cada vez más en augmento.

Se está matando al amor
y con él,
las melodías,
la inspiración,
los sueños.

sábado, 7 de septiembre de 2019

¿Pan o Arte?

Pieles
ochocientos ochenta gramos de aflicciones
empaquetadas
al módico precio de lágrimas de acero.

Bohemia difunta,
            versos en cenizas,
inhalar todas las arterias
del corazón del poeta.

Migajas de todo lo que fue,
el mismo palacio
del EGOCENTRO.

¿Le apetecería adquirirlo?